Libros de Youtubers
Últimamente (Últimamente una mierda, desde el puto primer libro) ha suscitado mucha polémica el salto al papel de la gran mayoría de los youtubers de habla hispana. Esto, en su mayoría, es fruto de la envidia de todos aquellos que no son capaces de contactar con las editoriales y llegar a ver sus obras publicadas.
He decidido dividir el video en distintos puntos que analizaré uno a uno. En primer lugar, están los argumentos, en su mayoría sin sentido, con los que se ataca a los youtubers y a sus obras.
“Solo publican porque son youtubers” ¡Sí! ¡Por supuesto que sí! Las editoriales son un negocio, para ser más gráficos, imaginémonos una tienda de ropa, una mercería de pueblo, por ejemplo. El comercial llega con un catálogo y el dueño de la tienda escoge las prendas que creen que se van a vender mejor. Obviamente, si en el catálogo hay un diseñador famoso, venderá más. Esto es lo que pasó hace diez años con Agatha ruiz de la prada. Bolígrafos, carteras, libretas, ropa, absolutamente todo tipo de productos bajo el nombre de esa mujer fueron un rotundo éxito de ventas durante muchos años. Bien. ¿Cómo se traduce esto al mundo literario? Si un youtuber tiene 100.000 seguidores, en una venta perfecta (Obviamente esto es IMPOSIBLE y el porcentaje de venta sería de, como mucho, un 30%) vendería 100.000 ejemplares. A día de hoy, un youtuber con 100.000 seguidores es “uno más”, tenemos individuos con más de un millón de suscriptores. ¿Cómo te quedas si te digo que, en España, un escritor tradicional (AQUELLOS QUE NO SON FAMOSOS) no vende mucho más de 1000 ejemplares en UN AÑO? Si, esta es la triste realidad. Entonces ¿Acaso no es lógico que las editoriales acudan a los youtubers para aumentar los ingresos? Ahora toca otra vuelta de tuerca. ¿Sabéis que son los grandes autores como famosos, youtubers, best sellers internacionales y nacionales como Zafón o JK Rowling los que permiten la publicación de autores menores? La impresión de los ejemplares es financiada con los ingresos de los ya citados. Así que, siendo claros, no solo es lógico y normal, si no rentable y beneficioso para la industria literaria. Pero claro, también hay que tener en cuenta la diferencia entre una editorial y una mercería, y es que, a fin de cuentas, las editoriales son mecenas artísticos. Está bien que se publiquen libros de youtubers pero siempre con un mínimo de criterio al respecto. Esto nos lleva al siguiente punto,
“Calidad” ¿Hasta qué punto priman el arte o el negocio dentro del sector editorial? ¿Libros pésimos y millones de ingresos o grandes obras literarias que apenas dan para pagar las facturas? La respuesta es evidente. Como dije antes, el problema aquí es que, si las editoriales dejan de apostar por los escritores sin feedback la industria quedará en manos de influencers y famosos del panorama hispano hablante. El libro de Belén Esteban fue de los más vendidos en España, un libro que, probablemente, ni siquiera ha escrito ella. Pero ¿A que destina ese dinero la editorial? ¿Son los directores de estas empresas personas con sueldos millonarios? ¿Invierten un alto porcentaje de las ganancias en apostar por autores noveles y obras nuevas?
Todo esto nos lleva a una conclusión básica, el problema no es de los “youtubers” si no de las propias editoriales. Nadie va a decir que no ante la posibilidad de publicar un libro y ganar dinero con él. Youtube es un negocio pasajero que, llegado el momento, dejará de dar beneficios, por este motivo los creadores de contenido de la plataforma tienen que engancharse a los ingresos derivados del merchandising y los eventos.
“Ventas y mercado” Otro argumento que he leído mucho es que por culpa de los libros de los youtubers se ha dejado de publicar a otros autores. Esto es totalmente falso, la previsión de ventas de una editorial juega en función de los ingresos para determinar cuántos libros se publican en un año. Por ejemplo: La editorial decide publicar 10 títulos en un año, contando con un beneficio del 40% del total de las ventas. ¿Y si uno de esos libros pertenece a un youtuber? La previsión de ventas podría ser, por ejemplo, diez veces más de lo habitual. Por tanto, la editorial podría permitirse publicar 20 títulos en lugar de diez a lo largo de ese año.
Ahora sí, está el problema del público al que están enfocados estos libros y la literatura juvenil. La mayoría de los compradores están situados entre los diez y los veinte años, de forma que los libros serán pagados por sus padres y no por ellos. Si la estantería queda repleta de libros del Rubius, auronplay, wismichu, etc, no invertirán el dinero en literatura como tal. (Salvo que se trate de grandes fenónemos virales como Crepúsculo, Harry Potter, Divergente, etc.) De todas maneras, el 90% de su público no habría comprado literatura aun teniendo más dinero porque acuden a “tiro fijo” a la librería de turno para comprar específicamente el libro de su youtuber favorito. Por eso creo que deberíamos hacer una pronunciada diferencia entre libros de youtubers y libros de booktubers, teniendo los segundos un público estrictamente lector. Y después, en otro video, habría que hacer una diferencia entre libros “buenos” y “malos, dentro de youtubers por un lado y booktubers por otro.
“Los escritores tradicionales” Entiendo perfectamente a los escritores tradicionales, los que se sientan en su escritorio y, sin feedback que les ampare, dedican cientos de horas a escribir su novela. ¿Qué pasa con ellos?
Fundamentalmente, son los aspirantes a escritor quienes critican tan intensamente esta “moda” de publicar libros en el universo de youtube. Estas personas sienten una gran frustración porque tradicionalmente, acceder a una editorial con nuestro manuscrito bajo el brazo es toda una odisea. No se fijan siquiera en la calidad del texto, se centran en que es lo que va a reventar el mercado, en los años de crepúsculo, VAMPIROS, ¿Divergente? DISTOPIAS. Y siempre, si puede ser, puñeteras trilogías. Entonces nuestro querido y frustrado escritor, tras dedicar toda una vida a desarrollar sus novelas, se encuentra con que las redes sociales se transforman en un puente directo a la publicación, ya sea youtube, twitter (señorita bebi), Instagram (Defreds) y wattpad (Anna Tod) La conclusión general es, vivimos en un mundo capitalista, el dinero lo mueve todo y si quieres ser escritor tienes varias opciones. Concursos (Si no están amañados, tos, premio planeta) Envío a editoriales (Tardarán un año en contestar si es que lo hacen) Autopublicación (Dile adiós a tu sueldo) Amazon (Algunos lo consiguen, pero no te engañes, es uno entre un millón) Y lo que mejor resultado tiene ahora mismo, explota lo que te gusta en algún lugar de internet y espera a que suene la campana.
